GUERNICA
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A LOS ACONTEClMIENTOS
El bombardeo de la ciudad provocó desde el primer momento una guerra propagandística ente los dos bandos que hoy en día no se ha disipado totalmente.
En la página de la FundaciónMuseoDeLaPazDeGernika podemos obtener la siguiente información que sobre los acontecimientos y sus repercusiones:
El primer avión apareció hacia las cuatro de la tarde y dejó caer algunas bombas. Al cabo de unos quince minutos tuvo lugar la primera oleada, tres aviones en formación triangular que volaban muy bajo. Así empezó el bombardeo sistemático de Gernika que se prolongó durante más de tres horas.
Los aspectos técnicos del bombardeo de Gernika siguen siendo hoy uno de los temas más apasionantes de la historia contemporánea. La destrucción de Gernika fue obra de la Legión Cóndor alemana y de las fuerzas aéreas italianas, actuando bajo las órdenes del ejército franquista sublevado. La táctica militar que se aplicó fue tan devastadora que Gernika ha pasado a la historia como el primer ensayo de guerra total.
"Los aviones despegaban del aeródromo de Vitoria, rebasaban el litoral y luego, dando media vuelta, seguían el valle del Oca, atacando Guernica de Norte a Sur. Al parecer pertenecían a tres tipos: Heinkel 111, Junker 52 de bombardeo y Heinkel 51 de caza y ametrallamiento. Debieron formar dos masas, que se turnaban y en cuanto al número de cada una existe una general discrepancia. Por fijar ideas, bien podemos suponer que en cada oleada actuaban, entre bombardeos y cazas, alrededor de 15 a 20 aviones. Eran suficientes. Su táctica consistió en arrojar primero bombas rompedoras ordinarias, luego racimos de pequeñas bombas incendiarias y simultáneamente, ametrallar al personal al descubierto, no sólo el que se encontraba en la ciudad, sino también en sus alrededores e incluso en las anteiglesias comarcales."
Martínez Bande. Vizcaya.
Tras el bombardeo, Gernika quedó prácticamente arrasada. A la destrucción provocada por el ataque aéreo hubo que sumar el incendio que se propagó por el casco urbano de la villa, favorecido por el viento que sopló en las horas posteriores al dramático acontecimiento. Las pérdidas humanas son aún hoy difíciles de valorar, aunque los cálculos más aceptados hablan de 250 muertos y de cientos de heridos. La mayoría de las víctimas perecieron en los refugios o a causa de los ametrallamientos a campo abierto. Al caer la noche muchos guerniqueses abandonaron la villa, aún en llamas, y en el desconcierto del momento nadie supo exactamente cuántos de sus convecinos habían perecido en el ataque.
LA DIFUSIÓN DEL BOMBARDEO
La difusión de los hechos acaecidos en Gernika aquel 26 de abril de 1937 fue desde los primeros momentos objeto de una profunda controversia. Algunos testigos del bombardeo junto con las personalidades más representativas del Gobierno de Euzkadi y de la sociedad vasca, denunciaron al mundo la destrucción de la villa foral y la implicación del ejército alemán y franquista. La noticia apareció publicada en los principales medios informativos europeos, gracias a la rápida actuación de algunos periodistas entre los que destaca la figura de George Steer.
El bando nacional nunca reconoció su responsabilidad, al contrario, tergiversó las pruebas y utilizó la prensa franquista para acusar a los republicanos vascos, a quienes denominó rojos-separatistas, de haber provocado el incendio de la villa en su retirada hacia Bilbao. Hasta el día de hoy el ejército español no ha reconocido su implicación en el bombardeo de Gernika.
José Antonio Aguirre. Presidente del Gobierno de Euzkadi.
"Aguirre miente. Nosotros hemos respetado Gernika, como respetamos todo lo español".
Francisco Franco.
B DOS VISIONES
Símbolo del horror militar: el bombardeo de Guernica cumple 75 años
El infierno comenzó en la tarde del 26 de abril de 1937. De forma totalmente inesperada, a las 16:30 horas, aparecieron en el cielo de la pequeña ciudad vasca de Guernica los primeros bombarderos alemanes para ejecutar una orden brutal: reducir a escombros esta localidad del norte de España y causar la mayor cantidad de muertos posible, incluyendo a mujeres y niños.
El bombardeo nazi en medio de la Guerra Civil Española convirtió a Guernica hace 75 años en un símbolo mundial del horror militar, del sufrimiento indecible de la población civil en tiempos de guerra.
Pablo Picasso inmortalizó el espanto en su monumental cuadro antibélico “Guernica”, aunque algunos expertos sostienen que el genial pintor español ya había iniciado esta obra, destinada a la Exposición Internacional de París de 1937, antes del bombardeo inspirándose en la película “Adios a las armas”, basada en una novela del escritor estadounidense Ernest Hemingway.
Durante tres horas y media, los aviones de la Legión Condor, bajo el mando del teniente coronel Wolfram von Richthofen, bombardearon Guernica de forma sistemática. Más del 70% de los edificios quedó destruido, principalmente por el fuego causado por la gran cantidad de bombas incendiarias arrojadas sobre la localidad.
Hasta el día de hoy no se sabe a ciencia cierta cuántas víctimas dejó la masacre de Guernica, que contaba en ese momento con poco más de 6.000 habitantes, además de numerosos refugiados de la Guerra Civil. Las estimaciones de los historiadores oscilan enormemente, desde 120 hasta más 2.000 muertos, aunque los cálculos más recientes ubican el número real más cerca de la primera cifra.
El número relativamente bajo de víctimas se explica, según los historiadores, por el sistema de refugios para la población civil que se había construido en la localidad vasca tras el bombardeo de la cercana población de Ochandiano, el 22 de julio de 1936, el primero de la Guerra Civil, lanzado cuatro días después de su estallido.
Tampoco existe certeza total sobre el objetivo del bombardeo. Guernica, situada a unos 30 kilómetros al este de Bilbao, carecía de importancia estratégica militar en la guerra entre nacionales y republicanos. Al principio se especuló con que la operación aérea iba dirigida a destruir una fábrica de armas y un puente, pero ninguno de ellos resultó alcanzado por las bombas que llovieron sobre la población.
Otra teoría parte del supuesto de que las fuerzas nacionales comandadas por el general Francisco Franco querían romper la resistencia vasca destruyendo su lugar más “sagrado”, la capital cultural e histórica del País Vasco, donde el centenario Árbol de Guernica simboliza la tradición nacionalista y democrática vasca. Sin embargo, el monumental roble salió indemne del bombardeo.
Algunas fuentes indican que Hitler quería aprovechar el escenario bélico español para preparar a la fuerza aérea alemana para su propia guerra a escala mundial.
Un fuerte indicio de lo que fue el motivo real de la destrucción de Guernica lo dio en 1946 el mariscal Hermann Göring cuando explicó durante los juicios de Núremberg que con la intervención de bombarderos alemanes en la Guerra Civil Española en apoyo a los nacionales de Franco pretendía poner a prueba su joven fuerza aérea y dar a sus hombres la oportunidad de adquirir experiencia.
La explicación de Göring parece confirmar la interpretación británica de que Hitler quería aprovechar el escenario bélico español para preparar a la fuerza aérea alemana para su propia guerra a escala mundial. Y la destrucción de Guernica debería servir de mensaje de advertencia para Londres sobre lo que podrían esperar las ciudades británicas en caso de guerra.
Durante mucho tiempo, el régimen franquista que se instaló tras el fin de la Guerra Civil responsabilizó del bombardeo a Guernica a los “rojos”. No sólo los nacionales, sino también los republicanos habían utilizado ya antes de Guernica sus fuerzas aéreas para atacar objetivos civiles. Sin embargo, reporteros de guerra británicos que se trasladaron a Guernica para informar de lo ocurrido encontraron pruebas de la autoría alemana del bombardeo.
Alemania tardó más de medio siglo en presentar sus disculpas por el ataque. En 1997, el entonces presidente alemán, Roman Herzog, dirigió una carta a los supervivientes con motivo del 60 aniversario del bombardeo pidiendo públicamente perdón por este crimen de guerra.
El régimen franquista, por su parte, esperó hasta la década de los 70, pocos años antes de su desaparición, para reconocer oficialmente que Guernica fue destruida por fuerzas aliadas con los nacionales.
Hoy, ya casi nada recuerda el horror que vivió Guernica aquel lunes hace 75 años. Franco no tenía ningún interés en conservar las ruinas de la población como un monumento antimilitarista. La localidad fue reconstruida casi totalmente y su población volvió a aumentar para alcanzar actualmente los 16.000 habitantes.
Noticias24/internacional.24 de abril, 2012
Los estudios de Salas Larrazábal son concluyentes. Un número tan elevado de víctimas (entre 1.600 y 3.000) era imposible. El recuento de la recogida de cadáveres arrojó un número concreto, la cifra difícilmente alcanzaría los 200 fallecimientos. Estudios posteriores los reducen aún más y dan el número de 126 víctimas.
Los estudiosos del bombardeo de Guernica, como Paul Preston, han usado los documentos de la propaganda que se desarrolló durante los últimos meses de la Guerra Civil. Uno de sus tópicos fue que era día de mercado y que se bombardeó el recinto. Este apenas sufrió daños al no recibir el impacto directo de las bombas alemanas. Además, el bombardeo se produjo más de dos horas después del cierre de los puestos.
[...] La obra, alegato universal contra la violencia y la barbarie, viajó por Europa y EEUU —y el lienzo sufrió mucho por ello— en busca de simpatías y fondos para la causa republicana, silenciada tras el triunfo franquista, en 1939. Picasso expresó su deseo de que el cuadro no viniera bajo ningún concepto a España mientras no se restableciera la democracia. Y tuvieron que pasar más de cuatro décadas para que el 'Guernica' pisara suelo español. Un recibo de 150.000 francos sirvió al Gobierno para demostrar la propiedad de su encargo. El 10 de septiembre de 1981, el 'Guernica' aterrizaba en el aeropuerto de Madrid-Barajas.
LA OBRA DE PICASSO